¿Qué es el
mundo de la moda? ¿Cuál es su función social? O ¿Para qué sirve? Sería muy
básico decir que se limita a decirnos lo que debemos vestir… aunque no
andaríamos muy equivocados... pero hay mucho más.
No pensemos
que la moda se compone solo de revistas como Vogue o ELLE o de diseñadores como
Armani o Chanel. La moda extiende
sus brazos mucho más allá. En series de televisión, vistiendo actores o
futbolistas que son líderes de opinión, con más de mil revistas solo en España
y emporios de ropa y complementos como ZARA o H&M. En realidad se respira
el mundo de la moda las 24h del día. Desde que piensas por la mañana en qué
ponerte (influenciado por supuesto en la publicidad que te rodea) hasta que te
duermes cada noche estás en constante exposición.
Pero aunque
hemos contestado a la pregunta ¿Para qué sirve? No hemos profundizado en cómo nos
dejamos influir, en cómo nos afecta aún cuando creemos que estamos muy por
encima.
Existen dos
perfiles muy diferenciados de personas en función de cómo se visten, los que lo
hacen con ropa “que se lleva” o los que se visten con la ropa que les da la
gana. Lo gracioso del asunto es que la inmensa mayoría de ellos están más cerca
del otro grupo de lo que imaginan.
Si algo
tenemos en común todas las personas en cuanto a la ropa que vestimos es que
todos queremos ser auténticos, eso quiere decir que queremos vestir como nos
dicta nuestra razón en lugar de cómo nos lo pide la publicidad, pero es casi
imposible poder hacerlo porque estamos literalmente bombardeados en todo
momento: por la ropa que lleva la gente en nuestra ciudad, la que llevan
nuestros compañeros de trabajo o de estudios, nuestros actores y deportistas
favoritos, pancartas publicitarias, anuncios de tv,…
El mundo de
la moda invierte miles de millones de euros al año no solo en decirte como
vestir, también en hacerte creer que debes cambiar tu ropa cada temporada. Y pagar a actores, cantantes y deportirstas para influenciarte es solo una de sus armas.
¿Por qué
tanta inversión para algo tan superfluo? Después de todo la ropa solo sirve
para no pasar frío y para no ir desnudos por la calle ¿no? Desde luego llevamos
un siglo aprendiendo que la ropa
influye en la adaptación social, cumple una función o necesidad muy secundaria
pero cada vez más valorada, así que las grandes corporaciones intentan sacar
tajada.
Estamos
atravesando una crisis económica mundial como pocas se han sufrido en la
historia, así que la sociedad se ha apretado el cinturón y ha comenzado a hacer
un consumo muy selectivo tras valorar sus necesidades, pero por desgracia para nuestra libre elección y para nuestro bolsillo, la ropa y complementos siguen siendo una prioridad y no parece que ello vaya a cambiar.
Desde aqui os lanzo este simple pensamiento que no pretende ser ni siquiera una reflexión. Buenos días a todos!