Según el momento de tu vida como fotógrafo en la que te encuentres, sueles optar o te sientes más cómodo usando un objetivo zoom o uno fijo, generalmente asociado a que te sientas con más ganas de practicar, de evolucionar o no. Ya que un objetivo fijo te obliga a trabajar más en cuanto a moverte y te da más creatividad en cuanto a profundidad de campo.
Y no he mencionado la calidad, generalmente un fijo ofrece mejor calidad óptica que un zoom, pero si tenemos en cuenta que desde hace una década o más, ya disponemos de zooms de excelente calidad (equiparable en muchos casos a los fijos) aunque a precios desorbitados, es algo anecdótico hablar de diferencias notables en calidad.
realizada con objetivo zoom |
Si deseas aprender a moverte con la cámara en un paisaje, en la calle o en una sesión de moda o retrato, os recomiendo un fijo, es una gozada aunque acabas destrozado si estás varas horas.
realizada con objetivo fijo |
Si tienes un flujo de trabajo muy alto, haces 4-5 sesiones a la semana, un zoom te da versatilidad y comodidad para hacer unos encuadres distintos sin moverte del sitio.
Al final todo depende de tu gusto personal, de tus creencias en cuanto a calidad, de los objetivos que hayas comprado o heredado... calidad artística no ganarás con unos u otros, eso está en tu ojo.