Año 2014 apunto de terminar... vivimos en la época de la inmediatez, la falta de paciencia, la era express. Cada vez veo más en foros de fotógrafos anuncios como éste:
"Hola, me acabo de comprar una cámara réflex y me gusta esto de la moda, quiero modelo, maquillador, peluquero y estilista para hacer TFCD y empezar a ser fotógrafo de moda".
Después de todo es lo que piensa el 99,99% de los que compran una cámara, que solo necesitan los mejores modelos y colaboradores para hacer fotos como las de las mejores revistas, y pedir es gratis... Personalmente llevo 9 años como fotógrafo profesional en exclusiva (antes era asesor fiscal) y tuve una fase de aprendizaje de unos 2 años.
Dos años completamente auto-didacta, no existían talleres presenciales ni de compra en video, tampoco en youtube de retoque, así que a practicar, haciendo intercambios a una media de 2-3 a la semana con modelos de Litmind (entonces Fotopunto), solo modelos, nada de maquilladores ni otro colaborador. Practicar es practicar, solo eso, aprender a controlar la luz, los encuadres, composiciones, conocer las posibilidades de tu equipo de foto y de tu capacidad creativa, aprender a mover al modelo y elegir la luz y las fotos a hacer en función de su fisionomía, de la ropa, etc... Así que no necesitas que un modelo vaya maquillado por un profesional, ni peinado ni vestido con una ropa de showroom...
Cuando estás aprendiendo, no tienes la capacidad de garantizar resultados, por lo que puedes hacer perder el tiempo a maquilladores y demás que vengan. Aparte no necesitas para aprender a controlar la luz que el modelo sea profesional o que sea más o menos bello. Con esa filosofía empecé yo hace más de una década.
Si volviera atrás, tal vez tomara decisiones distintas en casos puntuales, pero no cambiaría un ápice de mi formación. Gracias a ella, a hacer muchas sesiones seguidas en el tiempo y con niñas que no tenían nada de experiencia (y muchas de ellas ni siquiera físico para ser modelos) pude aprender a controlar la luz sin presiones por parte de maquilladores o mías propias, pude aprender a mover a las modelos y controlar su posado, puede aprender a retocar para maquillar con Photoshop a las chicas.
Cuando eres una figura pública, yo no lo soy por mis fotos (hay mil fotógrafos mejores) pero si por el blog y por mi formación en venta, estás expuesto a críticas, cosa lógica y que nunca me ha importado lo más mínimo, ni siquiera cuando son más ataques personales que críticas a mi trabajo. Llegas incluso a oir que haces buenas fotos solo porque posan para ti modelos de mucho nivel, que luego no eres tan buen fotógrafo...
No sé si eso me da más pena o risa, y dar pena es para mi la peor cosa que puede provocarme una persona. Sin duda que posan para mi modelos muy guapas y de mucho nivel, tengo la suerte de trabajar con las mejores agencias del país, aunque cualquier persona con más de una neurona comprende que esas modelos de nivel no son la causa de mis (supuestas) buenas fotos, sino la consecuencia. Cuanto más partido sacas de un modelo al fotografiarlo, más publicidad positiva tienes por parte de dicho modelo y más se extiende la percepción de calidad de tu trabajo.
Yo empecé con chicas que ni eran modelos ni pretendían serlo, muchas de ellas sin físico, la progresión fue lenta en sesiones aunque rápida en el tiempo por hacer muchas sesiones al año. Después de más de 2500 sesiones y más de 1500 personas fotografiadas, ahora el nivel físico y de posado es muy alto, pero todo ha sido progresivo y sin intentar forzarlo.
Nunca posará para ti un modelo de un determinado nivel si no tienes tu mismo un determinado nivel como fotógrafo, tu eres selectivo y buscas lo mejor, los modelos hacen lo mismo, eres tan buen fotógrafo como buenos son los modelos que desean trabajar contigo.
Si intentas forzar un salto de calidad en tus sesiones o pretendes aparentar ser mejor de lo que eres, estarás retrocediendo en tu nivel y proyectarás una imagen aún más mala de ti como fotógrafo. al menos esa es mi opinión, no solo basada en mi experiencia sino también en la de cientos de fotógrafos que he visto aparecer, equivocarse y morir (fotográficamente) en tiempo récord.